25 de juny 2014



El dia 12 de juliol podeu escoltar el programa de l’Ofici de Viure.

Títol: Per què no flueixen els diners a la meva vida?


En aquest programa intervindran Assumpció Salat i Francesc Torralba.

En el programa parlem  de com seguir els senyals de la vida, de la tossuderia i de la constància, de la funció i la missió.

No us perdeu el programa el dia 12 de juliol, sinó també el podreu descarregar  de la web de Catalunya Radio , a partir del dia 12.


Intel·ligència Emocional
El desenvolupament de l’autoestima

Dates :      11 de juliol de 2014 (De 19:00 h a 21:00 h)
                   12 de juliol de 2014 (De 09:00 h a 13:00 h)


PRESENTACIÓ

En aquest curs obert a tothom reflexionarem com les nostres actituds internes i els nostres pensaments condicionen l’eficàcia, el benestar i l’harmonia de la nostra vida.

Tractarem continguts tal com l’autoestima, els sentiments de culpabilitat, i com desenvolupar una forta confiança i saviesa dins nostre.

LLEGIR MÉS...

Quantes vegades hem sentit dir allò de....” Geni i figura fins a la sepultura”. És així?. Són reflexions que us invitem a fer en aquesta xerrada. Ens preguntarem si el caràcter es pot canviar o no. Si naixem amb una determinada manera de ser o bé el nostre caràcter és fruït de l’educació i de l’entorn on ens hem criat. És el mateix caràcter que personalitat ? On està la diferència? Podem canviar la nostra manera de ser?. Com ho podem fer per ser autèntics?.
Això ens recorda aquella frase que moltes vegades ens han dit de ... “ has de ser tu mateix, no has d’imitar a ningú”. Com ho podem fer per ser autèntics?.
En aquesta trobada procurarem veure les diferències entre un i altre  concepte i aprendrem  algunes  eines que ens poden ajudar a descobrir i millorar qui som i com som.

CONTINGUTS

Concepte de qualitat humana.
El caràcter i la personalitat .
Els comportaments proactius i reactius.
Autovaloració de la pròpia conducta.
Els comportaments reactius de víctima, salvador i perseguidor.
Les relacions entre el nostre caràcter i la nostra salut física i emocional
La motivació i l’automotivació personal.

METODOLOGÍA

S’estudia a través de casos pràctics i de reflexions grupals com la maduresa del caràcter incideix directament a la nostra vida laboral i personal.
En el curs es donen una sèrie d’eines pràctiques per poder  aplicar els continguts
El curs va acompanyat d’un CD, gravat especialment per reforçar les eines que es donen en el curs i per poder fer més fàcilment les pràctiques.

Pot venir tothom, hagi o no fet algun curs al respecte.
I porteu les vostres preguntes i reflexions per poder compartir, ampliar i aclarir.

SERES DE LUZ


Uno de los incidentes más importantes de mi vida me ocurrió (a mí, Don) hace varios años durante un retiro espiritual de una semana en el Estado de Nueva York. Éramos alrededor de cincuenta personas y nos alojábamos en un hotel de comienzos de siglo, propiedad de nuestro profesor. Puesto que los terrenos y el interior de la vieja casa necesitaban mantenimiento constan­te, era el lugar idóneo para que hiciéramos trabajos manuales penosos y una oportunidad perfecta para observar nuestras resistencias y reacciones mien­tras trabajábamos. Era verano y el calor era intenso, había pocas duchas, las colas para los cuartos de aseo comunes eran largas y casi no teníamos perio­dos de descanso. Como todos sabíamos, todas esas condiciones físicas y co­munitarias entraban en el plan de nuestro profesor para sacar a la luz nues­tros «rasgos» de personalidad, con el fin de que pudiéramos observarnos con más claridad en la intensidad de ese laboratorio vivo.

Una tarde se nos dio la rara oportunidad de hacer una siesta de tres cuar­tos de hora entre trabajo y trabajo. A mí se me había asignado la tarea de ras­car la pintura de la pared exterior del viejo hotel, y muy pronto estaba cu­bierto de la cabeza a los pies de escamas de pintura seca. Al final de nuestra sesión de trabajo estaba tan agotado y sudoroso que no me importó la sucie­dad; necesitaba una siesta, y tan pronto nos dieron la señal de dejar el traba­jo, fui el primero en llegar al dormitorio común y meterme en la cama. Poco después llegaron la mayoría de los otros chicos de ese dormitorio y a los cin­co minutos ya estábamos todos disponiéndonos para dormir.
En ese momento llegó el compañero de habitación que faltaba. Alan. Le habían asignado el trabajo de cuidar a los hijos de los miembros del grupo, y por su forma de entrar, con un portazo, y de tirar las cosas a su alrededor era clarísimo que estaba furioso por no haber podido desocuparse antes para su­bir a dormir la siesta. Pero sí tuvo tiempo para hacer bastante ruido y no de­jar descansar a nadie más tampoco.



Poco después de que entrara Alan metiendo bulla, me ocurrió algo pas­moso: vi que mis reacciones negativas subían por mi cuerpo como un tren que llega a una estación; y no me subí al tren. En un instante de simple clari­dad, vi a Alan con su rabia y frustración, vi su comportamiento tal como era, sin añadidos ni complejidades, y vi cómo se iba «acumulando» mi rabia para descargarla sobre él; y no reaccioné a nada de esto.


Al limitarme a observar mis reacciones de rabia y autojustificación en lugar de actuar según ellas, fue como si de pronto se hubiera descorrido un velo ante mis ojos y me abrí. En un instante se disolvió algo que normal­mente me bloqueaba la percepción, y vi el mundo completamente vivo. De pronto Alan era encantador y los demás chicos perfectos en sus reacciones, fueran las que fueran. Miré por la ventana y con igual asombro vi que todo lo que me rodeaba brillaba desde dentro. La luz del sol en los árboles, las ho­jas mecidas por la brisa, el suave crujido de los paneles de vidrio en los viejos marcos de la ventana, todo era demasiado hermoso para expresarlo con pala­bras. Me quedé extasiado ante lo milagroso que era todo; todo, absoluta­mente todo, era hermoso.


Continuaba en ese estado de asombrado éxtasis cuando me reuní con el resto en la meditación de última hora de la tarde. Al profundizar en la medi­tación, abrí los ojos y miré a mi alrededor, y entré en lo que sólo puedo defi­nir como una visión interior cuya impresión ha permanecido en mí durante años.


Lo que vi fue que cada una de las personas reunidas allí era un «ser de luz». Vi claramente que todos estábamos hechos de luz, que éramos como formas de luz, pero sobre esa forma había surgido una corteza; esa corteza era negra y de consistencia gomosa, como alquitrán, que oscurecía la luz interior que era el yo verdadero de cada persona. En algunas partes la capa de alqui­trán era muy gruesa y densa; en otras, más delgada y transparente. Las per­sonas que han trabajado en sí mismas durante más tiempo tienen menos al­quitrán e irradian más de su luz interior. Debido a sus historias personales, otras personas están cubiertas con más alquitrán y necesitan trabajar muchí­simo para quitárselo.

Alrededor de una hora después, la visión se fue desvaneciendo y desapa­reció. Cuando terminó la meditación teníamos más trabajo que hacer; me apresuré a ir a realizar una de las tareas más ingratas: fregar los platos en la ca­lurosa cocina, pero dado que aún seguía palpable cierto residuo del éxtasis, esa tarea también fue un momento de dicha.



Relato esta historia no sólo por su importancia para mí personalmente, sino también porque me enseñó de manera gráfica que las cosas de las que vamos a hablar en este libro son reales. Si nos observamos con sinceridad y sin juzgarnos, si vemos en acción los mecanismos de nuestra personalidad, podemos despertar y nuestra vida puede ser un maravilloso despliegue de belleza y dicha.

Del libro de Risso i Husson “ La sabiduría del Enegrama”